Ya se nos marcha una año más, y por esas cosas de la vida, una prolífica amiga me indicaba que cuidara algo más el blog, como ella cuida los suyos, pero la verdad que hay tanto que decir, que no sabría por donde empezar y mucho menos cuando acabar.
Son tantas las cosas que agradan y desagradan, tantas las cosas que pasan por la mente, por los ojos y los oídos de uno, que ya casi que las ve uno pasar como quien ve llover, sabedor de que contranatura no se puede ir, a lo más comentarlas o denunciarlas en lugares como este, porque al final se vuelve uno un cobarde, preso en sus ideas y sus palabras, sin poder hacer nada por cambiar tanto que habría que cambiar en nuestro entorno más cercano, porque los lejanos nos quedan como grandes, como imposibles y utópicos.
Todos los años, como todos los segundos parecen pasar iguales, aunque no sea así, siempre hay algo en especial que recordar, pero en la rutina diaria, en la monotonía de cada día, termina uno agachando la cabeza y no queriendo saber más allá de las cuatro paredes, que cual cárcel dan cobijo a la vida de cada uno.
Si no sales a la calle malo, ya se encargarán los medios de comunicación, familiares, amigos o conocidos en traerte las malas noticias y/o problemas a la puerta de tu casa, así que ya no sabe uno donde estará seguro.
Cuatro señores se han reunido para programarnos la vida, para seguir en su juego de ajedrez personal, donde todos somos peones a su servicio y para colmo nos bombardean con el dichoso 21 de diciembre de 2012, para meter más miedo en el cuerpo, aunque personalmente sé que no pasará nada... pero cuanto incauto, inculto (que haberlos ailos), incluso se suicidarán como cuando hubo el cambio de milenio.
Sales a la calle y la ves abarrotada, y te preguntas ¿dónde está la dichosa crisis?, ¿será un movimiento más de las piezas del ajedrez para recolocar las piezas fundamentales (Reina y Rey) en posiciones más ventajosas al final de todo esto?
Y todos echamos chispas hablando de las diversas situaciones que acontecen cada día, porque bajo mi punto de vista España se desmorona, se va a pique, y nadie movemos un dedo para hacer nada por evitarlo. "Ande yo caliente, riáse la gente", "El mal de muchos consuelo de tontos", refranes estos en los que nos amparamos para mirar para otro lado, para no querer pensar en que alguna de las piedras que forman España terminará salpicándonos.
Esperemos que el próximo año, en verdad, al menos en la parte que me toca, resuelva tantas incógnitas que hay por resolver, que a todos nos traiga en verdad algo de aquello que pedimos en justicia, porque la salud es algo que siempre estará ahí y cada día menos depende de nosotros, si no miremos los tantos rumores que han surgido tras la llamada gripe A.
En fin amigas que espero que el venidero con la ayuda del que se encuentra por encima nuestra, sea algo más provechoso, más saludable, más venturoso, más cordial, más amable y amistoso y sobre todo que llegue lleno de amor y comprensión, para resistir los empujones que la vida nos dé o los empujones que los cabrones que mueven las fichas nos quieran dar.
Os dejo aunque no viene al caso que refiero, alguno de los porqués de no haber enganchado alguna otra palabra antes a mi blog.
UN MUY FELIZ AÑO 2010 LLENO DE LOS MEJORES DESEOS Y QUE VUESTROS SUEÑOS E ILUSIONES SE HAGAN REALIDAD
